Gericó Associates entrevista a Javier Prados, Director Jurídico Corporativo de Alten Energías Renovables

“La función jurídica en Alten cuenta con la máxima importancia y apoyo dentro de la organización, y es tomada muy en consideración en la definición de los planes estratégicos”

Hoy entrevistamos a Javier Prados, Director Jurídico Corporativo de Alten Energías Renovables. Acumula más de 15 años de experiencia tanto en despachos de abogados como General Counsel. ¡No se pierdan esta entrevista!

¿Cuál es su función específica? ¿En qué consiste ser General Counsel?

Soy el General Counsel y Secretario del Consejo de Administración de Alten Energías Renovables y de sus filiales. Adicionalmente presido el Comité de Ética y Cumplimiento del Grupo Alten, consistiendo todo ello básicamente en asegurar la mejor defensa de los intereses del grupo en sus operaciones, ejecutando la función jurídica de la Compañía tanto a nivel corporativo como en el desarrollo y ejecución de los proyectos en cada una de las jurisdicciones en las que Alten opera.

Adicionalmente, asesoro a los miembros del Consejo de Administración sobre los diferentes aspectos legales que surgen en la ejecución de nuestros proyectos, incluyendo cuestiones de cualquier tipo siempre que tenga una ramificación jurídica o que sean estratégicamente importantes.

¿Cómo está estructurado el departamento legal, tanto local como globalmente?

Tenemos una estructura horizontal en la que una parte de los abogados ejercen la función jurídica para los asuntos y proyectos que surjan en las jurisdicciones en las que opera la Compañía en África mientras que el resto lo hace para América (principalmente México). Igualmente, el Departamento Jurídico ejecuta también la función de compliance normativo global y tratamos siempre de tener una alta involucración en los proyectos de la Compañía desde el inicio, lo que facilita que ejerzamos la función jurídica de forma más proactiva. A nivel local Alten organiza el asesoramiento jurídico a través de abogados de firmas locales con los que mantenemos una permanente coordinación y colaboración a distintos niveles de evolución de los proyectos de la Compañía. A medida que la Compañía vaya creciendo en proyectos y tenga mayor implementación internacional, iremos valorando la incorporación al equipo de abogados in-house locales atendiendo siempre a criterios de necesidad y racionalidad. Gracias al pronunciado perfil internacional de los abogados del Departamento Jurídico de Alten, podemos hacer frente al asesoramiento internacional de la Compañía en las jurisdicciones en las que opera.

¿Cuáles son los retos y oportunidades clave a las que hace frente su equipo legal en estos momentos?

Nuestro mayor reto consiste en asegurar el cumplimiento de la legalidad y asesorar a la Compañía durante la ejecución del plan estratégico y en sus negocios en cada una de las jurisdicciones en la que opera. Ello plantea retos de adaptación continua a distintos modelos de trabajo en cada jurisdicción, normativas distintas y particularidades jurídicas no siempre bien definidas ni conocidas, adaptabilidad a diferentes sensibilidades legales y a culturas muy diferentes, teniendo que improvisar soluciones, toma de decisiones de forma rápida, mantener visión de conjunto, etc. Todo ello supone, entre otros, una clara oportunidad de crecimiento profesional y desarrollo en áreas profesionales y habilidades que de otro modo sería muy difícil obtener.

¿Existen desafíos para su equipo legal que impliquen tratar con jurisdicciones múltiples o negocios transfronterizos? ¿Cuenta su firma con un panel internacional?

La práctica totalidad del negocio de Alten se encuentran fuera de España en jurisdicciones del África Subsahariana y en Centro América (México) por lo que siempre contratamos a firmas de abogados internacionales con presencia en esas jurisdicciones o firmas locales de la propia jurisdicción.

Recientemente venimos repitiendo estructuras de asesoramiento consistentes en contar con una firma de primer nivel en España que cuente también con presencia, bien propia bien a través de firmas asociadas en esas jurisdicciones, encomendando a esa firma funciones de coordinación y asesoramiento puntual cuando la falta de recursos nos impide realizarlo nosotros.

No contamos con un panel de firmas internacionales, sino que más bien adaptamos los criterios de selección según el proyecto de que se trate. En cualquier caso, sí que tenemos algunas firmas “preferidas” por habernos ayudado en momentos críticos y haberse ganado nuestra confianza, aunque ello no se traduzca nunca en capacidad para dejar de cumplir los requerimientos de la Compañía del modo y forma que se indique.

Para nuestro perfil de empresa, no pensamos que los paneles de firmas de abogados sea una opción demasiado llamativa y estamos siempre abiertos a colaborar y trabajar con firmas que presenten experiencia interesante, interés, capacidad y carácter innovador en la llevanza del asunto de que se trate.

¿Cuánta importancia tiene los asuntos legales en la estrategia internacional de su compañía?

La función jurídica en Alten cuenta con la máxima importancia y apoyo dentro de la organización, y es tomada muy en consideración en la definición de los planes estratégicos. Las jurisdicciones en las que operamos hacen que los asuntos legales sean más complejos, imprevistos y difíciles de gestionar, no sólo desde el punto de vista técnico sino cultural y social. La pieza legal es en Alten fundamental en el puzle de cada proyecto, sobre la que se asientan el resto de las actuaciones y sin la cual no se avanza con el nivel de seguridad requerido. Hemos conseguido un elevadísimo nivel de integración con las áreas de negocio lo cual ha ayudado a dotar a la función jurídica de la máxima importancia.

¿En qué casos contrata a un abogado externo en lugar de que el trabajo lo realicen los in-house?

Siempre que exista una dificultad técnica que no pueda cubrirse con solvencia por el departamento jurídico, ya sea porque se requiera un conocimiento particular o una experiencia precisa; cuando existe incapacidad de recursos para acometer un proyecto concreto por acumulación de tareas, establecimiento de prioridades o se trate de una cuestión que requiere solución urgente; cuando se trate de una cuestión que implique un elevado riesgo para la Compañía por ejemplo por impacto económico; o cuando se trate de actuaciones jurídicas o proyectos que no formen parte de la actividad recurrente de Alten y que tengan por tanto carácter excepcional que no justifique su realización por parte de los recursos de Alten.

¿De qué modo instruye a los abogados externos a nivel local e internacional?

Para proyectos de mayor envergadura, en Alten trabajamos con RfPs y RfQs que nos permiten transmitir a los potenciales asesores legales de forma objetiva e idéntica los pormenores del proyecto de que se trate. Son parte fundamental de nuestro procedimiento de compras y permiten invitar a las firmas preseleccionadas por Alten en el proceso de selección. Establecemos numerosas reuniones telefónicas o presenciales, invitamos a las firmas a nuestra oficina para conocernos en persona y ofrecemos aclaraciones de cualquier tipo para asegurar que la oferta de servicios que presenten resulta realmente válida para el proceso. Les instruimos a través de reuniones involucrando siempre a las áreas de negocio, organizamos reuniones breves para puntualizar temas abiertos y tratamos siempre de esta muy cerca de ellos durante el proceso de asesoramiento. Incluso organizamos procesos de feedback (una asignatura pendiente de las firmas de abogados) una vez finalizado el proyecto lo que es siempre muy bien recibido por las firmas de abogados.

En aquellos proyectos de menos envergadura, los procesos se simplifican mucho y simplemente utilizamos documentos creados junto con las áreas de negocio asegurando que las cuestiones que se plantean son lo más precisas posible.

¿Cuáles son los elementos clave a la hora de decidir qué firma de abogados externa contratar?

Los elementos clave para tomar esa decisión no son siempre los mismos y dependerán de factores relacionados con el asunto en cuestión como, por ejemplo, la urgencia, jurisdicción de que se trate, sector afectado, de si afecta a un proyecto o se trata de una cuestión a nivel corporativo, etc.

De entre los principales factores a tener en cuenta, solemos considerar que los más importantes incluyen la experiencia reciente del despacho en cuestiones iguales o similares, la relación cercana en el tiempo con otros asesores que pudieran intervenir en el proyecto, el conocimiento particular del área de práctica o del socio de que se trate sobre la cuestión suscitada, o el coste presupuestado (coste razonable, transparente, bien fundamentado, estructuras de fees innovadoras, etc.).

Recientemente venimos exigiendo también una serie de criterios adicionales que incluyen tener una política clara y fundamentada de igualdad de género, trabajar durante el proyecto bajo sistemas de Legal Project Management que nos permitan tener una clara trazabilidad del avance del asunto, o ser innovadores tanto en la propuesta como en la gestión del proyecto, sabiendo adaptarse a los requerimientos del equipo de negocio.

¿Cuáles han sido la mejor y peor experiencia en la contratación de abogados externos?

La mejor experiencia tiene que ver con un equipo de abogados involucrado al máximo con el objetivo perseguido por la Compañía, capaces de entender las particularidades organizativas y técnicas internas, con excelente capacidad de adaptación, y que supieron sacar adelante una operación que llegó a cancelarse hasta en dos ocasiones todo ellos gracias principalmente a tres actitudes básicas que siempre supieron combinar excelentemente: flexibilidad, perseverancia y rigor técnico.

Las malas experiencias sirven para aprender y tratar de evitar que ocurran de nuevo en el futuro. En cualquier caso, con una buena elección de estructura de asesoramiento legal, la peor de las experiencias puede ser todavía fructífera y hasta cierto punto positiva. ¡Sinceramente me cuesta recordar alguna!

¿Qué es lo que todo buen servicio de asesoría in-house debe reunir?

Conocimiento profundo del negocio, de la compañía (plan de negocio, estrategia, misión, visión) y del sector (competidores, principales actores), excelentes habilidades técnicas con un buen conocimiento del derecho y de las principales normativas aplicables, así como un profundo formación en el área financiera con capacidad de entender un balance, cuentas de resultados, preparación de un presupuesto, etc. Habilidades sociales, escucha activa, buena capacidad de comunicación y persuasión, empatía con su cliente interno, cercanía, amabilidad (más que inteligencia), capacidad de adaptación, flexibilidad y firmeza, suaviter in modo, fortiter in re y, por supuesto, actitud positiva, capacidad de disfrute e interés en la mejora profesional continua.

Muchas gracias Javier, ¡agradecemos mucho sus respuestas!

Gericó Associates

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